mayo 20, 2008

ESPACIO

Yo te ofrezco una compañía,
una amistad muy amorosa,
un amor muy amistoso,
llámalo como quieras,
pero si en tu vida
tan alegre, tan activa,
encuentras un espacio
para alguien que te escriba
y te lleve en alto vuelo
con su alfombra voladora
tejida con poesía;
para alguien que te aguarde
siempre con paciencia,
pero no con menos ansia
de abrazarte cuando llegues;
para alguien que te pase
las respuestas que te falten
y si ninguno las tuviere
conseguirlas como fuera,
pero siempre en compañía;
para alguien que le brinde
un refugio a tu descanso
y una vela a tu vigilia;
para alguien que valore
como nadie tu belleza,
tu alegría y tu inteligencia,
que admire tus virtudes,
que señale tus errores,
que te ayude en lo que pueda,
que te aprenda lo que sabes,
que te piense a toda hora,
y te enamore cada día,
pero sobretodo,
si encuentras ese espacio
para alguien que te quiera,
que te quiera más que a nadie,
entonces yo me ofrezco,
yo te ofrezco mi vida,
porque está ya convencida
de que no nació para otra cosa.

Pero si ese espacio no lo encuentras,
o se encuentra reservado
para alguien más afortunado,
sólo espero que al que elijas
para estar en ese espacio
se dedique cada día
a brindarte con sus actos
lo que yo mismo ofrecía,
porque menos no mereces
de alguien que te quiere,
que te adora y que te estima,
como yo lo hago ahora
y como espero hacerlo siempre.

No hay comentarios: